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Arquitectos: Eldridge Anderson Architects
- Área: 200 m²
- Año: 2021
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Fotografías:Ben Hosking
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Este proyecto fue una oportunidad para diseñar una casa para nosotros mismos: un lugar para trabajar y descansar, un espacio que mejore el ritual de la vida cotidiana, perímetros que se expandan para involucrar al paisaje y mediar la privacidad y el medio ambiente, un edificio que funcione bien mientras envejece maravillosamente. Se trataba de un proyecto para explorar ideas personales y hacer evolucionar los principios de nuestra práctica, manteniendo al mismo tiempo una tranquila moderación y pureza de intención.
La casa fue concebida como un único espacio que podía dividirse en zonas para vivir. Descubrimos que el aspecto del lugar que más disfrutábamos era el de sentarnos bajo los eucaliptos con el sol del norte durante el día y el refugio que proporcionaban los toldos mientras disfrutábamos de la brisa marina. Nos atrajo la sensación de conseguir esto durante todo el año, y los orígenes del diseño se remontan a esta idea de una cubierta que flota sobre el lugar bajo los eucaliptos.
A partir de esto se introdujeron cuidadosamente otras ideas y requisitos. Esto motivó el desarrollo del núcleo central que define la privacidad, e integra todos los servicios públicos mientras mantiene la libre circulación alrededor del perímetro. En este proyecto no había habitaciones que tuvieran la expectativa convencional de una habitación con paredes y una puerta. La zonificación adaptable se extiende al paisaje, donde la casa puede abrirse casi por completo y ajustar las pantallas exteriores para ampliar los volúmenes internos o definir aspectos del lugar.
La solución estructural se resolvió con elegancia para permitir esta flexibilidad a través de una estructura de madera, trabajando estrechamente con el arquitecto paisajista aseguró la experiencia completa del sitio y el área más grande más allá del perímetro físico de la casa. El uso predominante de la madera era importante, ya que requiere cuidado en la aplicación y permite la delicadeza del revestimiento, la resistencia de la estructura y la durabilidad del revestimiento de madera dura. El olor de la madera y el sonido de las pisadas sobre este material son de una gran calidad.
La escala interna de la casa se expande hacia el norte y mantiene una presencia sustancial para la modesta huella de 100 metros cuadrados, lo que se convierte en una contribución clave a su eficiencia, coste y sostenibilidad (regulada internamente por la refrigeración pasiva y una única fuente de calor) junto con su uso de materiales duraderos reutilizados, incluyendo la estructura con capacidad de ser desmontada.
El formato de la casa se estableció y desarrolló a lo largo de varios años refinando las proporciones y la estructura que informan el funcionamiento de los espacios. Las pantallas exteriores de madera articulan la forma y ofrecen la oportunidad de establecer un perímetro ajustable por capas. Su papel es tanto funcional como estético, ya que su sencillo funcionamiento afecta el día a día, ya que articulan sutilmente la forma y regulan la luz interior y la privacidad. A lo largo del día, la sensación de los espacios cambia por la forma en que la luz se permite, se refleja, se filtra o se excluye a través de las pantallas. Es un gesto poderoso que resulta aún más dramático y variado de lo previsto.
